Irán podría volver a enriquecer uranio en pocos meses

Source: The Conversation – (in Spanish) – By J. Guillermo Sánchez León, Instituto Universitario de Física Fundamental y Matemáticas (IUFFyM), Universidad de Salamanca

Ultracentrifugadoras para obtener uranio enriquecido. Wikimedia Commons, CC BY

Desde la Revolución islámica de 1979, los líderes religiosos de Irán han manifestado en diversas ocasiones su intención de lograr la aniquilación de Israel. Estas amenazas han sido tomadas muy en serio por el Estado israelí, especialmente desde que, en agosto de 2002, se reveló que Irán, paralelamente a su programa nuclear civil, mantenía en secreto un programa de desarrollo de armas nucleares, violando así el Tratado de No Proliferación Nuclear (TNP), del cual es firmante.

Este tratado ha sido un pilar fundamental para limitar el desarrollo de la tecnología nuclear a fines pacíficos y, sobre todo, para evitar la proliferación de armas nucleares más allá de los países que ya las poseían antes de 1967. Sin embargo, no ha impedido que otras naciones no firmantes del tratado, como India, Pakistán, Israel y Corea del Norte, hayan desarrollado sus propios arsenales nucleares.

La vigilancia del cumplimiento del TNP recae en el Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA o IAEA), cuyos inspectores supervisan las instalaciones nucleares en todo el mundo, controlando en particular los inventarios y movimientos de materiales como el uranio y el plutonio.

¿Qué es el uranio enriquecido?

El uranio, en estado natural, esta básicamente formado por dos isótopos: U-238 y U-235. Para muchas aplicaciones civiles –como los reactores nucleares para generación de energía o la producción de isótopos para uso médico– es necesario enriquecer este elemento. Esto consiste en aumentar la proporción de U-235 por encima del 0,7 % que contiene el uranio natural.

El método más común para enriquecer es utilizar ultracentrifugadoras: cilindros de aproximadamente 10 centímetros de diámetro y 4 o 5 metros de altura. En estos cilindros, el uranio está en forma de hexafluoruro de uranio (UF₆) en estado gaseoso, lo cual requiere mantenerlo por encima de 56 ºC, ya que a temperatura ambiente es sólido. Las ultracentrifugadoras, que giran a altísimas velocidades, desplazan el U-235 hacia su centro, de donde es extraído.

El enriquecimiento necesario para usos civiles rara vez supera el 5 % de U-235, mientras que para la fabricación de armas nucleares se necesita que sea superior al 90 %. También puede emplearse plutonio-239, aunque su manejo y producción son tecnológicamente más complejos.

Instalaciones de riesgo en Irán

Muy pocos países posen la capacidad de enriquecer y este proceso se realiza en instalaciones civiles vigiladas por la OIEA, en ninguna de las cuales se obtiene uranio altamente enriquecido. De hecho, desde 1986, el número de ojivas nucleares en el mundo ha disminuido significativamente, aunque todavía persiste una cantidad capaz de provocar una catástrofe global.

Esta reducción generó un excedente de uranio y plutonio de uso militar, especialmente en EE. UU. y Rusia (anteriormente, Unión Soviética), lo que llevó a ambos países a deshacerse de una parte sustancial de sus reservas de uranio altamente enriquecido y plutonio.




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Una excepción es Irán, que ha utilizado su instalaciones de enriquecimiento para obtener uranio enriquecido por encima de lo justificable para fines civiles –energía, medicina, etc.–. En varias ocasiones, Israel ha atacado las instalaciones nucleares iraníes y, en una operación particularmente destacada, logró inutilizar sus ultracentrifugadoras mediante un sofisticado virus informático.

Tratado fallido

En 2015, bajo la iniciativa del presidente Barack Obama, se firmó un acuerdo nuclear entre Irán y las principales potencias mundiales. En él, Teherán se comprometía, entre otras cosas, a no enriquecer uranio-235 por encima del 4 %, bajo la supervisión del OIEA.

Desafortunadamente, en mayo de 2018, durante su primer mandato, el presidente Donald Trump decidió retirar a EE. UU. del acuerdo.

Aunque los inspectores del OIEA continuaron supervisando las instalaciones iraníes, ya no tenían autoridad para imponer restricciones al nivel de enriquecimiento, dado que el acuerdo dejó de estar en vigor. Su función se limitó a observar y documentar el uso de los materiales nucleares.

Imagen por satélite de las instalaciones nucleares de Natanz, antes de ser bombardeada por EE. UU. el 22 de junio de 2025.
Wikimedia Commons., CC BY

Los informes del OIEA indicaron que Irán poseía al menos 400 kg de uranio enriquecido al 60 %, justificado por Teherán como material para investigación. Supuestamente en respuesta a esta información, Israel bombardeó las instalaciones nucleares iraníes de Fordow, Natanz y Isfahán. Fordow y Natanz son instalaciones de enriquecimiento, mientras que Isfahán es un centro tecnológico con varios pequeños reactores nucleares de investigación.

Sin embargo, se sabe que muchas de estas instalaciones están protegidas bajo decenas de metros de tierra. Las propias autoridades israelíes reconocieron que con sus bombas no podían penetrar ese blindaje, por lo que solicitaron la intervención de EE. UU., que atacó las instalaciones con sus armas no nucleares de mayor potencia.

En las instalaciones de enriquecimiento, la liberación de sustancias nucleares es muy improbable y el riesgo para la población es escaso. No es así el caso de Isfahán, donde la destrucción de los reactores podría provocar al liberación de productos de fisión y, con ellos, una enorme cantidad de radiación.

Monumentos históricos en la ciudad iraní de Isfahán.
Wikimedia Commons., CC BY

Suficiente para tres bombas atómicas

Para las autoridades iraníes, este ataque era previsible y, aunque es posible que las instalaciones hayan sido destruidas, no hay garantía de que uranio altamente enriquecido no hubiera sido previamente trasladado. Los 400 kilos registrados por el OIEA puede almacenarse en tres o cuatro cilindros pequeños de UF₆, algo que es sencillo camuflar y transportar.

Esa cantidad bastaría para obtener, con relativa facilidad, unos 200 kg de uranio enriquecido al 95 %, suficiente para fabricar tres bombas atómicas rudimentarias similares a Little Boy, lanzada sobre Hiroshima en 1945.

Termonucleares, un peligro aun peor

Aunque Irán llegase a fabricar 2 o 3 bombas, es dudoso que las arrojase contra Israel o EE. UU. porque, probablemente, recibiría como respuesta unas decenas de bombas miles de veces más potentes que arrasarían su propio país. El peligro que se plantea es el grado de desarrollo tecnológico que dispone para fabricar sofisticadas bombas nucleares de segunda generación, las conocidas como termonucleares, mucho más destructivas.

Pequeñas cantidades de U-235 y/o Pu-239 pueden actuar como iniciadoras de la explosión termonuclear, recurriendo al efecto Ulm-Teller. Este consiste en el uso de una bomba atómica de fisión nuclear a modo de disparador, colocada cerca de una cantidad de combustible de fusión nuclear. El uso de la “implosión de la radiación” comprime el combustible de la fusión y consigue su encendido.

Con esa tecnología, que es la disponible por los países nucleares, 200 kg de uranio altamente enriquecido permitirían disponer de varias decenas de cabezas nucleares fácilmente transportables en misiles.

Hasta ahora teníamos, o creíamos tener, a través de las inspecciones de la OIEA, un conocimiento de las actividades nucleares que se realizaban en Irán. Rota esta vía, no es descartable que Irán busque seguir los pasos del Corea del Norte, que parece dispone de unas decenas de bombas atómicas funcionales, a costa de un gran aislamiento internacional.

Urge un compromiso internacional

En el momento de escribir estas líneas, Irán ha cortado las relaciones con la OIEA. Según Rafael Grossi, director general la OIEA, este país tendría capacidad para empezar a enriquecer uranio de nuevo en pocos meses.

En este escenario, es fundamental recuperar un control internacional de las armas nucleares, empezando por Estados Unidos y Rusia, que deben reducir sustancialmente sus arsenales como hicieron en el pasado. Por otro lado, algunas declaraciones del presidente Trump hacen dudar del compromiso que EE. UU. tiene en la defensa de los países europeos miembros de la OTAN frente a una amenaza nuclear rusa. Si no se dispone de esta garantía, la Unión Europea puede plantearse el desarrollo de una defensa nuclear propia.

De hecho, el presidente de Francia, único país de la UE con armas nucleares, se ha referido en alguna ocasión a la puesta a disposición de la UE de su arsenal. Es fundamental que EE. UU. disipe estas dudas. Si no, corremos el riesgo de entrar en un mundo donde las amenazas del uso de armas nucleares se multipliquen con los riesgos e incertidumbres que ello supondría.

The Conversation

J. Guillermo Sánchez León no recibe salario, ni ejerce labores de consultoría, ni posee acciones, ni recibe financiación de ninguna compañía u organización que pueda obtener beneficio de este artículo, y ha declarado carecer de vínculos relevantes más allá del cargo académico citado.

ref. Irán podría volver a enriquecer uranio en pocos meses – https://theconversation.com/iran-podria-volver-a-enriquecer-uranio-en-pocos-meses-260018

El tesoro químico oculto en el polvo de las calimas

Source: The Conversation – (in Spanish) – By Laura Collado Brunete, Investigadora Titular en foto(termo)catálisis, IMDEA ENERGÍA

Calima en la ciudad de Málaga en marzo de 2022. Eduardo Frederiksen/Shutterstock

A menudo lo percibimos solo como una molestia: cubre los coches, tiñe de ocre los cielos y deja una capa rojiza sobre las ciudades durante episodios de calima. Sin embargo, el polvo del desierto, ese visitante inesperado que llega impulsado por el viento desde tierras lejanas, podría estar contándonos una historia muy distinta si lo miramos con atención.

Bajo el microscopio, este polvo revela una composición rica en minerales, algunos con propiedades sorprendentes. ¿Y si lo que consideramos un residuo atmosférico fuera, en realidad, un recurso natural con potencial para generar energía limpia?

Mucho más que tierra en el aire

Cada año, especialmente durante el verano, miles de millones de toneladas de polvo son levantadas desde regiones áridas del planeta, formando gigantescas masas de aire cargadas de partículas en suspensión. Estas nubes, conocidas como calima, pueden recorrer miles de kilómetros y llegar a zonas tan diversas como el norte de Europa, Oriente Medio o incluso la selva del Amazonas.

Lejos de ser un fenómeno anecdótico, el polvo del desierto tiene efectos reales y de gran alcance: puede fertilizar suelos, modificar la formación de nubes, alterar los patrones de lluvia o incluso influir en el desarrollo de huracanes. También tiene un impacto directo sobre la salud humana, ya que las partículas finas que transporta pueden penetrar en el sistema respiratorio, aumentando el riesgo de enfermedades cardiovasculares y respiratorias.




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Pero más allá de estos efectos conocidos, hay un hecho menos evidente. Este polvo está compuesto por minerales que pueden absorber la luz del sol y activar reacciones químicas, es decir, puede actuar como un material fotocatalítico natural.

Imagen que muestra la península ibérica en tonos naranjas y marrones según la cantidad de polvo depositado.
Representación de la deposición total de polvo en Las Rozas (Madrid) el 15 de marzo de 2022, durante la tormenta Celia.
Datos de la Oficina de Modelización y Asimilación Global de la NASA (GMAO), CC BY-SA

Un cóctel mineral con propiedades ocultas

En un estudio reciente, hemos analizado muestras de polvo recogidas tras la tormenta de calima Celia, que afectó a buena parte de España en marzo de 2022. Descubrimos que este polvo proveniente del desierto del Sáhara está formado en su mayoría por minerales comunes como cuarzo, calcita, feldespato potásico y dolomita.

Estas partículas, tan ligeras y finas que el viento puede levantarlas con facilidad, son las responsables de las espectaculares nubes rojizas que cruzan el cielo durante los episodios de calima. Pero lo más interesante no está en lo que abunda, sino en lo que aparece en pequeñas dosis.

En torno al 1 % de la muestra contenía rutilo (una forma cristalina de dióxido de titanio, TiO₂) y minerales ricos en hierro como la hematita. Estos compuestos tienen propiedades fotoactivas, es decir, son capaces de absorber la luz del sol y activarse para desencadenar reacciones químicas. En otras palabras, el polvo del desierto contiene, de forma natural, los mismos ingredientes que usamos en el laboratorio para preparar fotocatalizadores activos para la producción de hidrógeno.

Tres imágenes, una de satélite y dos de una muestra de polvo donde aparecen distintos minerales con diferentes colores
(a) Imagen del satélite Aqua (NASA) y fotografía de una muestra del polvo. (b) Imagen de microscopio y (c) análisis químico: titanio (rojo), hierro (naranja), calcio/magnesio (verde), silicio (azul).
Laura Collado, CC BY-SA

Comparación con un fotocatalizador comercial

Para comprobar si este potencial se traducía en resultados reales, probamos el polvo como fotocatalizador en un reactor solar experimental. Al exponerlo a la luz del sol en presencia de vapor de agua y etanol, el material fue capaz de generar hidrógeno. Y además esta producción fue 250 veces mayor que la obtenida con el dióxido de titanio comercial usado como material de referencia, comparando la cantidad de titanio presente en ambas muestras.

Además, realizamos ensayos de reutilización y estabilidad, comprobando que el polvo mantenía su actividad tras varios ciclos de uso consecutivos. Los resultados confirmaron que el polvo mantenía su actividad fotocatalítica sin desactivarse, convirtiendo a este material en un candidato prometedor para futuras investigaciones, especialmente basadas en tecnologías solares y materiales naturales y abundantes.

Distintos gráficos que representan la producción de hidrógeno solar utilizando polvo sahariano como catalizador en diferentes condiciones
Producción de hidrógeno solar empleando polvo sahariano como fotocatalizador. (a) Fotoreactor solar de fase gaseosa a escala de planta semipiloto, equipado con colectores. (b) Producción de hidrógeno a partir de una mezcla de agua y etanol en función de la energía solar recibida. (c) Comparación de la producción acumulada de hidrógeno solar entre el polvo y el dióxido de titanio comercial usado como referencia. (d) Experimentos de reutilización con polvo sahariano lavado (ensayos durante 3 días) y comparación con una muestra de TiO₂ no reutilizada.
Laura Collado, CC BY-SA

De residuo a recurso

Nuestro estudio propone una forma de mirar al polvo del desierto no solo como un fenómeno molesto o un residuo atmosférico, sino también como un material con valor oculto. Inspirado en la naturaleza, el trabajo plantea una estrategia de aprovechamiento que encaja con los principios de sostenibilidad y economía circular, sacando partido a lo que ya tenemos, sin necesidad de grandes transformaciones ni costosos procesos industriales.

En un escenario global marcado por el cambio climático, la escasez de recursos y la expansión de las zonas áridas, repensar cómo gestionamos materiales abundantes y poco valorados, como el polvo en suspensión, cobra más sentido que nunca.

Más allá de su aplicación inmediata, esta investigación abre nuevas líneas para el desarrollo de tecnologías solares que apuesten por lo simple, lo natural y lo local. Y nos recuerda que, a veces, las soluciones más prometedoras pueden estar flotando literalmente en el aire.

The Conversation

Laura Collado Brunete no recibe salario, ni ejerce labores de consultoría, ni posee acciones, ni recibe financiación de ninguna compañía u organización que pueda obtener beneficio de este artículo, y ha declarado carecer de vínculos relevantes más allá del cargo académico citado.

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Trastornos alimentarios en mayores: sin una buena dentición, no hay apetito

Source: The Conversation – (in Spanish) – By Juan Carlos Gavira Tomás, Doctorando en Ciencias de la Salud, Universidad de Castilla-La Mancha

buritora/Shutterstock

Los trastornos alimentarios son una realidad compleja y, a menudo, subestimada. Comúnmente se asocian con adolescentes y adultos jóvenes que sufren problemas psicológicos relacionados con una insatisfacción por su imagen corporal, desencadenantes de patologías como la bulimia o la anorexia.

Pero los adultos mayores también pueden experimentar importantes alteraciones en su relación con la comida. En este grupo, la imagen pasa a un segundo lugar, y desempeña un papel muy importante la pérdida de facultades físicas debidas a la edad. Asimismo influyen los cambios de condiciones sociales y económicas de esta etapa de la vida.

Cuando alguien de avanzada edad no come, lo más fácil es pensar que no le gusta nada o que se ha vuelto muy delicado. Técnicamente, puede sufrir lo que se conoce como hiporexia, una pérdida de apetito característica en personas mayores que puede deberse a múltiples causas: psicológicas (ansiedad, depresión…), fisiológicas (deterioro de los sentidos del gusto y el olfato, efectos de diversas enfermedades…), etcétera.

A continuación nos detendremos en uno de los factores más determinantes: la dificultad para masticar bien.

“En mucho más se ha de estimar un diente que un diamante”

En El Quijote, Miguel de Cervantes expresa por boca del hidalgo caballero la importancia de conservar los dientes. Podemos verlo en el episodio que narra la dura batalla con unos pastores en la que sale maltrecha su hasta entonces perfecta dentadura.

“En toda mi vida me han sacado diente ni muela de la boca, ni se me ha caído ni comido de neguijón ni de reuma alguna”, exclama don Quijote. Y al comprobar Sancho su lamentable estado, se lamenta: “¡Sin ventura yo! qué más quisiera que me hubieran derribado un brazo, como no fuera el de la espada. Porque te hago saber, Sancho, que la boca sin muelas es como molino sin piedra, y en mucho más se ha de estimar un diente que un diamante”.

No es exagerado que el Caballero de la Triste Figura comparara el valor de sus muelas con el brazo de la espada. Junto con las glándulas salivares y los músculos, son los órganos fundamentales de la masticación, la primera fase en el proceso de alimentarnos.

Así, al masticar, trituramos el alimento y estimulamos la secreción de saliva, que contribuye a saborear lo que comemos. La comida reduce el estrés y mejora el bienestar. Es un momento muy importante del día durante el que se estrechan las relaciones humanas.

Siendo jóvenes no pensamos que, con el paso de los años, nuestro organismo inevitablemente se irá deteriorando. Perderemos dientes y facultades para masticar. No somos conscientes de que para los adultos mayores la hora de compartir la mesa cambia radicalmente.

Pocas visitas al dentista

Además, las personas de más de 65 años vivieron unas circunstancias muy particulares. En 1960, por ejemplo, había en España 1 469 dentistas, en comparación con los más de 42 000 que hay actualmente. No existía la cultura de la higiene dental. La visita al dentista era poco frecuente y en la mayoría de los casos suponía la extracción de piezas dentales.




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A esto hay que añadir una mayor esperanza de vida y que, con el uso, “las piedras del molino” se van deteriorando.

A primera vista parece un hecho irrelevante, pero desencadena en el organismo una cascada de consecuencias. Cuanto mayor es el deterioro, mayores son las respuestas y más afectan a la salud general y al estado de ánimo.

La pérdida de los dientes impide triturar los alimentos, y no masticar impide que se estimulen las glándulas encargadas de producir saliva. La comida mal masticada está formada por trozos grandes y sin mezclar con dicha saliva, lo que retrasa la digestión y la asimilación.

Entonces, los alimentos pasan rápidamente al estómago, donde los ácidos gástricos tienen que redoblar esfuerzos para que los nutrientes estén disponibles y hagan su función de regeneración y reparación celular.

Las consecuencias son: disfagia por la dificultad al tragar (aumentada por algunas enfermedades neurológicas como el párkinson), falta de saliva (agravada por ciertos medicamentos), acidez o meteorismo. Esto desencadena un malestar físico y desánimo con el momento de comer.

Una reparación a veces inviable

La solución pasa por la reposición de los dientes perdidos mediante prótesis. Sin embargo, para los adultos mayores, muchas veces resulta inviable esta reparación, debido a varias causas: la pérdida o el deterioro de los tejidos de la boca, el cambio de domicilio a una residencia o la escasa cuantía de la pensión.

Además, el organismo responde a la ausencia de dientes con una recesión de los maxilares que dificulta el soporte adecuado de la prótesis. La reabsorción del hueso mandibular hace que el canal del nervio dentario quede en una localización muy superficial, y la presión de la restauración puede provocar heridas y un dolor insoportable al masticar.

Todas estas circunstancias hacen que, para las personas mayores, el importante acto de la comida pase de ser un placer a una tortura. Esto obliga a realizar cambios en la dieta, priorizando productos más fáciles de masticar, pero menos nutritivos. También afecta a las relaciones sociales, por la incomodidad al mostrar sus dificultades para comer. Las consecuencias físicas y psicológicas son muy importantes.

El ritual de la comida

En conclusión, prestar atención a las dificultades para masticar de los mayores puede ser determinante para evitar muchos problemas físicos y psicológicos. Los trastornos alimentarios pueden tener consecuencias graves, como desnutrición, pérdida de masa muscular, debilitamiento del sistema inmunológico y deterioro de la calidad de vida.

Reconocer, valorar y tratar la capacidad para masticar es esencial. Participar del ritual de la comida favorece la salud y el estado emocional. Una vejez saludable y digna necesita compartir este importante momento del día.

The Conversation

Las personas firmantes no son asalariadas, ni consultoras, ni poseen acciones, ni reciben financiación de ninguna compañía u organización que pueda obtener beneficio de este artículo, y han declarado carecer de vínculos relevantes más allá del cargo académico citado anteriormente.

ref. Trastornos alimentarios en mayores: sin una buena dentición, no hay apetito – https://theconversation.com/trastornos-alimentarios-en-mayores-sin-una-buena-denticion-no-hay-apetito-254940

Vínculos saludables: la clave para el bienestar digital de los adolescentes

Source: The Conversation – (in Spanish) – By Francisco Javier Malagón Terrón, Profesor Asociado en Ciencias de la Información, Universidad Complutense de Madrid

Actualmente, una de cada seis personas en nuestro planeta tiene entre 10 y 19 años, es decir, está en la adolescencia, etapa vital en la que los seres humanos experimentamos grandes cambios y en la que la salud mental puede verse afectada por múltiples factores. Se estima que el 14 % de la población mundial adolescente padece algún trastorno mental, aunque son muchos los que carecen de un diagnóstico y un tratamiento adecuados.

Los trastornos más comunes son la ansiedad y la depresión, y afectan a las relaciones sociales, al rendimiento académico, e incluso pueden llevar al suicidio, tercera causa de defunción en las personas de 15 a 29 años. También son frecuentes los trastornos del comportamiento, como el déficit de atención e hiperactividad y el trastorno disocial, así como los trastornos de la conducta alimentaria, la psicosis y el consumo de sustancias tóxicas.

En este contexto, hay que considerar también la presencia y uso masivo de las tecnologías de la información y la comunicación (TIC). El informe Impacto del aumento del uso de Internet y las redes sociales en la salud mental de jóvenes y adolescentes, realizado por Red.es en 2023, analiza cómo el uso intensivo de estas tecnologías influye en la salud mental de ese sector de la población en España.

Si bien son muchos los efectos positivos asociados al uso de las TIC (aceptación social, expresión creativa, conexión con amistades, etc.), también existen efectos negativos y riesgos a tener en cuenta. Entre ellos, la reducción de interacciones presenciales, el aislamiento social, los problemas emocionales, el uso compulsivo de servicios digitales y diversos trastornos mentales asociados.

Según el mencionado informe, entre los fenómenos que contribuyen al deterioro de la salud mental se encuentran el miedo a perderse algo (FOMO, de las siglas en inglés de Fear Of Missing Out), los comportamientos adictivos, la obsesión por cánones estéticos y el excesivo tiempo frente a las pantallas, de donde se derivan dificultades relacionales a nivel familiar y social.

Ahora, además, hay que contar con los efectos disruptivos de la inteligencia artificial generativa. Si bien tiene aplicaciones interesantes, puede influir en la salud mental de los adolescentes de manera negativa intensificando la retención de los usuarios frente a las pantallas, la exposición a contenidos inadecuados e información falsa, el ciberacoso, la manipulación emocional y la distorsión de la autoimagen y la identidad personal.

Riesgos de la IA

Una reciente investigación dirigida por Karen Mansfield, de la Universidad de Oxford, advierte de los riesgos que implican los dispositivos basados en IA que intentan imitar las capacidades cognitivas y de razonamiento de los humanos, al tiempo que son capaces de generar deepfakes o informaciones falsas eficaces.

El estudio revela también el escaso consenso que existe entre los especialistas acerca del impacto de las TIC en la salud mental de los jóvenes, así como la falta de estudios específicos relacionados con la influencia que está ejerciendo la inteligencia artificial.

Con todo, hay que admitir que la interacción entre adolescencia, condiciones sociales, TIC y salud mental es ciertamente compleja, y aún falta profundizar mucho más en el conocimiento basado en la evidencia científica. Pero eso no implica que debamos quedarnos de brazos cruzados, esperando a despejar todas las dudas. Entre otras razones, porque vivimos un periodo histórico de profundos y continuos cambios que nos sitúan, una y otra vez, en la frontera de lo que desconocemos. Aunque sea sobre un principio de provisionalidad, es necesario explorar respuestas a una situación que socialmente se percibe como un fenómeno cada vez más grave.

Salud mental: niveles

En un artículo publicado recientemente en la Revista Iberoamericana de Gobierno Local, he tenido ocasión de proponer a debate un modelo de aproximación a la problemática de la salud mental de la población infantil y adolescente. La propuesta se adecúa, según creo, a las posibilidades de actuación de los ayuntamientos, a las organizaciones educativas y al tejido asociativo de la sociedad civil, además de ser aplicable a otros sectores de la población.

Esquema de los problemas de salud mental en forma de iceberg
Modelo de los problemas de salud mental.
Francisco Javier Malagón Terrón/Telos, CC BY-SA

Este modelo representa la realidad de la salud mental en forma de iceberg. Mientras en su zona emergente encontramos una creciente acumulación de patologías mentales diagnosticadas (nivel 1), inmediatamente por debajo del nivel del agua se extiende una gran masa de hielo en la que se concentran las patologías aún no diagnosticadas (nivel 2).

Si seguimos descendiendo, daremos con todas esas personas que tienden a experimentar sufrimiento persistente o crónico, muchas de ellas en riesgo de evolucionar hacia la enfermedad mental (nivel 3). En lo más hondo, en la zona menos bañada por la luz solar, se encuentra una condición humana inexorable y universal: la experiencia del sufrimiento (nivel 4). El ser humano es un animal sintiente, que padece dolor emocional, de manera más o menos intensa y duradera, en múltiples ocasiones, desde el nacimiento hasta la muerte.

Cada uno de los niveles expuestos puede recibir respuestas específicas a través de cuatro líneas de acción:

a) Las patologías diagnosticadas (nivel 1) deben ser atendidas por servicios clínicos especializados que, en muchos casos, necesitan contar con la colaboración de un entorno familiar y social que apoye los tratamientos.

b) En el siguiente nivel, donde se concentran las patologías no diagnosticadas (nivel 2), cobran protagonismo los servicios y dispositivos de identificación y derivación de casos. Eso incluye la atención médica primaria y pediátrica, los servicios sociales, el profesorado de los centros educativos y el tejido asociativo, entre otras figuras. En este nivel cobran gran importancia también la información y asesoramiento que puedan recibir las familias.

c) Más abajo, donde se sitúa el malestar emocional crónico (nivel 3), importa el papel que pueden desempeñar tanto los entornos seguros donde sentirse aceptados, exentos de cualquier forma de violencia, como las personas de referencia. Estas últimas, desde la confianza y el buen criterio, pueden proporcionar acompañamiento y apoyo emocional para construir vínculos sanadores.

d) En el nivel más profundo, el trabajo necesario debe orientarse en dos direcciones complementarias:

  • Crear las condiciones que aseguran la calidad de vida, interviniendo en áreas tan diversas como vivienda, salud, educación, cultura, deporte, consumo, transporte, medios de comunicación, seguridad ciudadana, medioambiente o urbanismo.

  • Fomentar que los ciudadanos adquieran habilidades o competencias existenciales: gestión emocional, asertividad, empatía, resiliencia, resolución dialogada de conflictos, trabajo en equipo, liderazgo distribuido, planificación, etc.

Esto ayudará a prevenir y manejar el sufrimiento, rebajando su impacto y haciéndolo productivo para mejorar la vida, tanto a nivel personal como colectivo. Aquí adquiere sentido enseñar, desde la primera infancia, el difícil arte de construir y gestionar los vínculos sociales.

Este modelo se complementa con un enfoque de trabajo basado en los cuidados, cuya perspectiva transversal aplicada a las políticas públicas tiene en cuenta cinco aspectos o pilares fundamentales:

a) El cuidado personal, que cada persona practica sobre sí misma, con una visión integral de su salud (física, psicológica, relacional…).

b) El cuidado hacia otros seres humanos, de distinta condición y procedencia, conocidos y no conocidos, próximos y lejanos.

c) El cuidado del medioambiente natural y urbano, protegiendo la biodiversidad y contribuyendo a la existencia de hábitats acogedores.

d) La creación y mantenimiento de espacios seguros y protectores, inclusivos y libres de cualquier forma de violencia.

e) La construcción de instituciones cuidadoras, caracterizadas principalmente por proporcionar a las personas una atención suficiente, empática y respetuosa con sus derechos.

Esquema del enfoque de trabajo basado en los cuidados representado como un templo con cinco columnas
Enfoque de trabajo basado en los cuidados para las políticas públicas.
Francisco Javier Malagón Terrón/Telos, CC BY-SA

Desde el enfoque basado en los cuidados, se trata de crear las condiciones sociales y educativas necesarias para que las personas puedan alcanzar mayores niveles de bienestar integral. En este sentido, los ayuntamientos, los centros educativos o cualquier otra institución o entidad social pueden preguntarse: ¿De qué forma nuestras actuaciones se apoyan y tienen en consideración cada uno de los cinco pilares de este enfoque? ¿Dónde están nuestras áreas de mejora?

Aprendizaje y vínculos

Si nos paramos a pensarlo un poco, la mayor parte de nuestras experiencias de felicidad o sufrimiento suelen estar ligadas a las relaciones con otras personas: familiares, amigos, vecinos, compañeros de trabajo, jefes, clientes, etc. El estado emocional que experimentamos con ellas, sea positivo o negativo, más o menos intenso, pasajero o duradero, puede ser interpretado como un indicador del estado en el que se encuentra cada una de nuestras relaciones.

El vínculo humano necesita de, al menos, un “otro” para configurarse, pero no siempre ese “otro” es un ser humano, pues también establecemos vínculos con otros seres vivos (animales y plantas), con elementos naturales (montañas, ríos, bosques…), con objetos fabricados por los seres humanos (banderas, edificios…) y con ideaciones (identidad personal, religiones, ideologías políticas, filosofías de vida, marcas comerciales, etc.).

El dolor emocional y, en su extremo, la enfermedad mental pueden leerse como manifestaciones o síntomas de un vínculo problemático con algún “otro”, no siempre humano. Hoy las TIC y, recientemente, la inteligencia artificial, se han constituido en un “otro” de gran poder vinculante. Pero no es aconsejable responsabilizar únicamente a este o aquel “otro” amenazante. El dolor emocional rara vez tiene una sola causa porque en nuestras vidas existen múltiples “otros” y múltiples vínculos interdependientes.

Sobre esta base, y teniendo en cuenta que la configuración y transformación de los vínculos familiares y de nuevos vínculos con el entorno es un factor crítico en la adolescencia, conviene aprender a esta edad cómo construir vínculos saludables con uno mismo y con el entorno.

El modelo iceberg presentado admite en todos sus niveles plantear las distintas líneas de actuación ante la problemática de la salud mental y el malestar emocional como un desafío en términos de sanación de vínculos deteriorados y construcción de vínculos sanadores.

Igualmente, el enfoque de trabajo basado en los cuidados propone tener en cuenta cinco pilares directamente implicados en la construcción de vínculos que contribuyan al bienestar integral de la persona.


Este artículo se publicó originalmente en la Revista Telos de la Fundación Telefónica, y forma parte de un número monográfico dedicado a la Generación Alfabeta.


The Conversation

Francisco Javier Malagón Terrón colabora con Telos, la revista que edita Fundación Telefónica.

ref. Vínculos saludables: la clave para el bienestar digital de los adolescentes – https://theconversation.com/vinculos-saludables-la-clave-para-el-bienestar-digital-de-los-adolescentes-260080

Hemos perdido, ¿y qué? La importancia de la derrota en el aprendizaje

Source: The Conversation – (in Spanish) – By Daniel Piulats Vilá, Profesor universitario, Universitat de Barcelona

Ganar o perder en una competición es algo natural y esperable. Sin embargo, no todo el mundo es capaz de aceptar fácilmente la derrota. ¿Se puede aprender a perder? ¿Se puede enseñar? Por su importancia para el desarrollo cognitivo emocional y social, compartimos aquí algunas estrategias para entrenar a los niños y adolescentes a aceptar la derrota con deportividad.

Enseñar a hacer las paces con la derrota

Antes de participar en una competición, ya sea en un examen, un juego o un evento deportivo, podemos explicar al niño o al adolescente que en la mayoría de las competiciones siempre habrá ganadores y perdedores. Cuando se sienta triste por haber perdido, subrayemos que es un sentimiento completamente comprensible. Dejemos que exprese su tristeza, pero recordando que no debe quedarse atascado en su fracaso, el cual suele ser temporal.

Si se gestiona adecuadamente, la derrota puede ser una oportunidad para la autoevaluación, para aprender de los errores y para mejorar en el futuro.

Seguir las normas establecidas

Cuando los niños y los adolescentes compiten, es importante enseñarles a respetar las normas existentes, aunque no les gusten o incluso si no las entienden. Cumplir las normas puede ayudarlos a ser y comportarse de manera honesta y evitar la tentación de hacer trampas. Al inculcar una actitud de respeto hacia las normas, se aleja a los niños y adolescentes del comportamiento de justificar cualquier medio para ganar a toda costa.

Dejar claras las reglas, e incluso ver partidos o competiciones previas fijándonos en ellas, es fundamental para que no haya malentendidos; aquí nuestro ejemplo es vital.

Centrarse en la mejora personal

Frente a las derrotas, en lugar de caer en la tentación de culpar a los demás o acusar a los demás de hacer trampas, es mejor entrenar a los niños y adolescentes a focalizarse en mejorar sus propias carencias, compensándolas a modo de fortalezas.

Cuando el niño o el adolescente acepta o al menos tolera sus limitaciones y se esfuerza por mejorarlas, deberíamos reconocer su esfuerzo, para que pueda ser paciente y continuar el proceso de recuperación de confianza.

Dar ejemplo

Los niños y los adolescentes pueden aprender a afrontar mejor el fracaso a partir del ejemplo que nosotros como adultos les ofrecemos. Cuando hay que afrontar una derrota, podemos aprovechar para explicarles un fracaso nuestro, cómo reaccionamos (y cómo nos hubiera gustado reaccionar) y qué lecciones aprendimos.

Al escuchar nuestras experiencias, entenderá que perder o fracasar es natural y que, de hecho, nos puede pasar a todos.

Los niños y los adolescentes observan e imitan a las personas de su alrededor. Si somos capaces de articular nuestra decepción de manera positiva, de felicitar al rival por su victoria y por su juego limpio, y de reflexionar sobre lo que se podría hacer de manera diferente la próxima vez, estamos ofreciendo un buen ejemplo de saber perder.

Valorar explícitamente el esfuerzo

Cuando nos enfrentamos a una derrota a pesar de haber realizado un gran esfuerzo, a veces viene bien un reconocimiento en forma de pequeño obsequio o unas palabras de aliento. Este detalle puede servir como motivación inicialmente extrínseca para continuar practicando y compitiendo según las normas establecidas.




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Asumir los errores

Más allá de competiciones o exámenes, la manera en la que nos enfrentamos a los errores puede ayudarnos a crecer y evolucionar o puede hacernos sentir frustrados y deprimidos. Por eso, educar en la tolerancia al fracaso ayuda a crecer aprendiendo de los errores, ser agradecidos y no justificar cualquier medio poco ético para conseguir nuestros deseos.

¿Cómo hacerlo? La Fundación Novak Djokovic propone, en primer lugar, que los adultos sean pacientes: aprender a aceptar la derrota es un proceso, así que no se debe esperar que el niño o incluso el adolescente lo domine a la primera. Por esta razón, conviene exponerles a situaciones en las que pueda ganar o perder, sea en juegos, deportes, concursos; y hacer lo posible por que juegue a estas competiciones con otros niños, de acuerdo con su edad.




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Es importante entender que no solo no es malo querer ganar, sino que reconocerlo y comprenderlo forma parte también del proceso de aceptación de la derrota. Ofrecer apoyo emocional y presencia física, independientemente del resultado, es muy importante. Si ha ganado, nos podemos alegrar con él; pero si ha perdido, debemos estar ahí también, ayudando a gestionar las emociones negativas que está sintiendo.

Ni minimizar, ni silenciar

Hablar de manera profunda con los más pequeños cuando algo no ha ido como esperaban es fundamental para saber cómo se han sentido, qué les ha gustado o no de la competición, cómo entienden el resultado. Estamos creando así un vínculo afectivo estrecho con el niño.

Aunque siempre podemos encontrar aspectos positivos que elogiar, nunca debemos minimizar la importancia de la experiencia. El juego es la actividad más importante para el niño y es muy importante para el adolescente, y puede percibir una derrota como un desafío muy difícil de superar. Comentarios como “solo es un juego estúpido”, “no pasa nada”, “tampoco es para tanto”, no le ayudarán a afrontar las derrotas en el futuro.




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Cuando decimos cosas como “¿Por qué lloras? No es el fin del mundo”, le estamos transmitiendo que lo que siente no está bien. En lugar de eso, preguntemos cómo se siente, ayudemos a identificar la emoción o el cúmulo de emociones y animemos a estar en contacto con lo que siente hasta que se le pase y consiga calmarse progresivamente de manera adecuada.

Empoderar con deberes

Inmersos en una época de estímulos e imágenes de vidas perfectas, las generaciones más jóvenes necesitan especialmente, y se merecen, que los adultos les eduquemos en sus derechos, pero también en sus correspondientes deberes. Educarlos de manera realista les ayudará a afrontar los contratiempos y las frustraciones que con toda seguridad sufrirán en algunos momentos de sus vidas.

Como dijo el abogado estadounidense Wendell Phillips, la derrota no es nada más “que educación; nada más que los primeros pasos hacia algo mejor”.

The Conversation

Daniel Piulats Vilá no recibe salario, ni ejerce labores de consultoría, ni posee acciones, ni recibe financiación de ninguna compañía u organización que pueda obtener beneficio de este artículo, y ha declarado carecer de vínculos relevantes más allá del cargo académico citado.

ref. Hemos perdido, ¿y qué? La importancia de la derrota en el aprendizaje – https://theconversation.com/hemos-perdido-y-que-la-importancia-de-la-derrota-en-el-aprendizaje-259566

Descubierto un tercer objeto interestelar cruzando a gran velocidad el sistema solar

Source: The Conversation – (in Spanish) – By Josep M. Trigo Rodríguez, Investigador Principal del Grupo de Meteoritos, Cuerpos Menores y Ciencias Planetarias, Instituto de Ciencias del Espacio (ICE – CSIC)

El telescopio espacial Hubble captó el cometa interestelar Borisov pasar velozmente cerca del Sol NASA, ESA y D. Jewitt (UCLA), CC BY

La comunidad de expertos en asteroides y cometas lleva unos días ajetreada tras el descubrimiento del tercer objeto interestelar, designado provisionalmente como A11pl3Z. Se trata de un objeto realmente rápido que ha alcanzado nuestro sistema planetario a una velocidad de unos 245 000 km/h relativa al Sol.

Como en los dos casos anteriores (el cometa Borisov y ‘Oumuamua), A11pl3Z procede del espacio profundo. Estos objetos sólo son detectables cuando están a una distancia suficiente para que la luz reflejada del Sol llegue a los sistemas de rastreo telescópico actuales. De nuevo, el programa automatizado ATLAS ha sido el que ha realizado este histórico descubrimiento.

Descartado el riesgo de impacto con la Tierra

Tras la detección, diversos grupos han continuado el seguimiento del objeto para realizar medidas astrométricas precisas. Las imágenes digitales obtenidas por las cámaras CCD acopladas a los telescopios utilizados para el rastreo permiten captar las zonas por donde pasa el objeto, junto a centenares de estrellas entre las que se mueve.

Esas estrellas de fondo poseen coordenadas celestes conocidas, y sirven para medir la posición del objeto en relación a ellas. Poco a poco se reconstruye el movimiento del objeto en la bóveda celeste, proporcionando un arco en el que quedará incluida su órbita. Noche tras noche, las nuevas observaciones permiten medir su posición, incrementar ese arco observacional e ir mejorando su órbita para predecir mejor los movimientos futuros de A11pl3Z.

Es uno de los mejores ejemplos de colaboración a todos los niveles, tanto profesional y amateur como de carácter internacional.

El objeto interestelar A11pl3Z captado por David Rankin desde Saguaro Observatory.
Cortesía David Rankin

En estos momentos, casi un centenar de observaciones astrométricas han permitido mejorar la órbita preliminar. El programa Scout, del Centro para el Estudio de Cuerpos Menores (CNEOs) del Jet Propulsion Laboratory, ha descartado que pueda ser fuente de riesgo de impacto con la Tierra. De hecho, según las observaciones actuales no se aproximará a menos de unos 284 millones de kilómetros de nuestro planeta.

Sabemos que llegará a cruzar la órbita de Marte, pero una vez lo haga volverá a alejarse hasta que finalmente se vuelva a perder en el espacio interestelar. Podemos visualizar su recorrido en función de la fecha empleando el simulador del programa de investigación Catalina Sky Survey.

¿Qué conocemos sobre A11pl3Z?

Con un diámetro de entre 20 y 40 km, el nuevo objeto interestelar A11pl3Z parece proceder del disco galáctico, una zona donde es previsible que puedan originarse este tipo de objetos.

Se trata de un visitante extraordinariamente veloz. De hecho, es el cuerpo de origen interestelar con mayor excentricidad descubierto hasta la fecha. La geometría de su encuentro con el sistema solar le permitirá batir el récord de velocidad de paso relativa a la Tierra que, en abril de 2026, será próximo a los 90 km/s. Ejemplifica a la perfección el reto que puede suponer acercarse con una nave espacial a objetos tan veloces como planea la futura misión Comet Interceptor de la ESA.

Localización del Objeto interestelar A11pl3Z con el simulador del Catalina Sky Survey (CSS)
David Rankin/CSS

¿Asteroide o cometa?

La IAU ya ha confirmado que se trata de un cometa. Acaba de ser designado
por el Minor Planet Center como el cometa interestelar: 3I/ATLAS.

No era tarea fácil diferenciarlo. Las primeras imágenes obtenidas a 528 millones de kilómetros de la Tierra y a 678 millones de kilómetros del Sol lo mostraban bastante puntual, sin haber desarrollado la clásica envoltura difusa que llamamos coma y es característica de los cometas.

Sin embargo, los informes provisionales de actividad cometaria señalan una coma marginal y una cola corta de 3″ en una posición ángulo de 280 grados.

Por otro lado, es normal que un objeto sometido a las temperaturas extremadamente bajas del espacio interestelar durante millones de años pueda tardar más de lo normal en “despertar” de su letargo.

Los cometas son cuerpos con una inercia térmica significativa: el calor de la luz solar tarda en penetrar lo suficiente en el interior del objeto para que la sublimación de los hielos sea efectiva, despierte la actividad cometaria y se genere esa envoltura difusa que caracterizó al cometa 2I/Borisov.

En los próximos años está previsto que el Programa de Investigación del Espacio-Tiempo como Legado para la Posteridad (LSST) del Observatorio Vera Rubin pueda descubrir decenas de objetos interestelares. Esos descubrimientos nos permitirán aprender mucho más acerca del origen de esos rápidos intrusos, que ciertamente cabe tener en cuenta en nuestros programas de defensa planetaria.

Así pues, desde los diferentes sistemas de seguimiento de cuerpos menores, como los integrados en la International Asteroid Warning Network, estamos ahora centrados en programar observaciones de este tercer visitante interestelar durante las próximas noches, para seguir aprendiendo sobre su fugaz visita.

The Conversation

Josep M. Trigo Rodríguez recibe fondos del proyecto del Plan Nacional de Astronomía y Astrofísica PID2021-128062NB-I00 financiado por el MICINN y la Agencia Estatal de Investigación.

ref. Descubierto un tercer objeto interestelar cruzando a gran velocidad el sistema solar – https://theconversation.com/descubierto-un-tercer-objeto-interestelar-cruzando-a-gran-velocidad-el-sistema-solar-260324

Cómo proteger mejor a los menores tutelados, protegiendo a sus educadores

Source: The Conversation – (in Spanish) – By María Verónica Jimeno Jiménez, Profesora Titular Victimología, área Psicología Social, Universidad de Castilla-La Mancha

Comencé a trabajar como educadora social por casualidad, ya que no era uno de mis objetivos cuando estudié Pedagogía. Me presenté a una selección de personal de una ONG y me seleccionaron para trabajar en sus hogares tutelados. Pero ni mis experiencias profesionales anteriores como orientadora de un colegio, ni mi formación previa en Ciencias de la Educación, me sirvieron para prever lo que me iba a encontrar mi primer día de trabajo.

Allí, me encontré con un grupo de menores que, en su mayoría, a pesar de haber vivido experiencias de maltrato en sus contextos familiares, solo querían volver a sus casas. Menores que no entendían por qué tenían que vivir separados de sus familias y, en muchos casos, expresaban su frustración y dolor a través de conductas disruptiva: escapándose del hogar, recurriendo al consumo de sustancias, transgrediendo las normas…

Trabajé durante trece años en hogares tutelados. Un trabajo duro, emocionalmente intenso y muy poco reconocido, pero donde cada pequeño logro se vive con una gran satisfacción profesional y personal. Pude comprobar en primera persona cómo el maltrato vivido durante la infancia afecta de modo diferente a cada niño o niña. Pero, sobre todo, me encontré en un contexto difícil de gestionar, sin las herramientas necesarias para enfrentar los desafíos y brindar el apoyo y la protección que lo menores necesitaban.

La necesidad de comprender por qué algunos de estos menores lograban salir adelante mientras otros no, y cómo los educadores sociales podían contribuir a su proceso de recuperación, despertó en mí una profunda necesidad de investigar.

Hogares tutelados: ¿qué son?

Los niños y niñas de entre 8 y 18 años que no pueden vivir con sus padres o tutores legales por diversas razones (en situación de desamparo o en grave riesgo de cualquier forma de maltrato, o cuyas familias no pueden atender sus necesidades básicas de forma temporal) conviven en grupos pequeños de diferentes edades en lo que llamamos “hogares tutelados”, pisos o casas donde están supervisados por educadores sociales.

Estos trabajan con un grupo de menores doblemente vulnerabilizado: por su condición de ser menores y por haber sufrido experiencias traumáticas durante su infancia o adolescencia. Sus circunstancias familiares a menudo han impedido que desarrollen un apego seguro con figuras adultas de referencia.

El apego desorganizado, tipo de apego inseguro que se relaciona directamente con la experiencias de maltrato en la infancia, provoca dificultades conductuales, emocionales o problemas de adaptación que requieren una intervención constante y especializada.




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Cómo crear un entorno seguro

Estos niños, niñas y adolescentes necesitan entornos seguros donde se respeten los derechos de la infancia y se promueva un ambiente protector a nivel físico, psicológico y social, y es lo que se compromete a darles la ley, por ejemplo en España.

Un ambiente protector supone no solo que no exista violencia: implica también darles la oportunidad de desarrollarse plenamente como personas, para lo que la dimensión emocional es básica. Dicho esto, ¿cuál debería ser la principal función de un educador social dentro del acogimiento residencial como sistema de protección?

El educador social debe actuar como un tutor “de apego”, capaz de fomentar un contexto compensador y promover el desarrollo de apegos seguros.

Cómo formar tutores de apego

¿Cómo se forma un educador social como tutor de apego? En general, la formación universitaria en áreas de bienestar infantil se basa en contenidos generalistas, sin ofrecer asignaturas de especialización en maltrato infantil y acogimiento residencial.

Los educadores sociales necesitan formación específica en derechos de la infancia y garantía infantil, teoría del apego, cómo se construye este y cómo influye en la evolución de los menores, rasgos asociados al tipo de apego inseguro, cómo establecer vínculos afectivos seguros con los menores, psicología del trauma y consecuencias afectivas, sociales y cognitivas de los procesos de victimización en niños y adolescentes. También cómo intervenir y actuar ante conductas disruptivas.




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Formación permanente

Aunque en los últimos años se ha avanzado en la atención residencial, mejorando las condiciones de los hogares, reduciendo la ratio de menores y contratando a profesionales con perfil específico en el área de las ciencias sociales, todavía queda mucho por hacer para mejorar la precariedad de los educadores sociales y la falta de formación continua y especializada.

Más allá de la formación que hayan recibido, los educadores sociales necesitarán formación continua en el manejo de situaciones adversas y en el acompañamiento emocional.

Es fundamental mejorar los protocolos actuales de actuación en los Hogares Tutelados. Por ello, desde el Grupo emergente de Investigación en Victimología y Psicopatología de la Infancia y de la Adolescencia (G-VIPIA) del Centro de Investigación en Criminología de la UCLM, y con el apoyo de la Dirección General de Infancia y Familia de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, estamos trabajando para optimizar el modelo de intervención en estos hogares.

Protegerse para proteger mejor

Nuestro objetivo es proporcionar a los educadores sociales las herramientas necesarias para que puedan convertirse en educadores de apego, capaces de crear entornos seguros y protectores. Estos entornos permitirán a los menores tutelados reconstruir sus vínculos afectivos y superar sus traumas. Para lograrlo, es esencial una coordinación efectiva entre todas las autoridades, familias y servicios implicados.

Es necesario que la sociedad y las administraciones públicas reconozcan, apoyen y valoren el trabajo esencial que los educadores sociales llevan a cabo en estos espacios. Para lograr un acogimiento residencial de mejor calidad, con mejores programaciones y actuaciones profesionales, es necesario garantizar una formación continua de los profesionales que trabajan en ellos. Una formación que es la mejor protección para quienes protegen.

The Conversation

María Verónica Jimeno Jiménez no recibe salario, ni ejerce labores de consultoría, ni posee acciones, ni recibe financiación de ninguna compañía u organización que pueda obtener beneficio de este artículo, y ha declarado carecer de vínculos relevantes más allá del cargo académico citado.

ref. Cómo proteger mejor a los menores tutelados, protegiendo a sus educadores – https://theconversation.com/como-proteger-mejor-a-los-menores-tutelados-protegiendo-a-sus-educadores-258513

Propiedad intelectual: retos en la legislación de la impresión 3D

Source: The Conversation – (in Spanish) – By Belén María Moreno Cabezalí, Profesora de Organización de Empresas, Universidad Rey Juan Carlos

Reflexpixel/Shutterstock

La fabricación aditiva, mejor conocida como impresión 3D, está revolucionando el sector del diseño y la producción, permitiendo crear objetos tridimensionales a partir de archivos digitales. Un avance que trae consigo muchas oportunidades y una infinidad de aplicaciones, pero que también plantea grandes retos jurídicos, sobre todo en materia de propiedad intelectual.

La facilidad y velocidad de creación y distribución de diseños que permite la impresión 3D es indiscutible. Sin embargo, la legislación que debe regular el uso correcto de esta tecnología resulta aún insuficiente. La progresiva digitalización del diseño exige adaptar los marcos normativos con el fin de dar solución a los desafíos actuales.




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¿Qué es un dato de diseño?

Un concepto clave en la impresión 3D son los datos de diseño, esto es, los archivos digitales necesarios para producir un objeto tridimensional.

Por un lado, tenemos el archivo de diseño asistido por ordenador (CAD, de Computer-Aided Design), que permite modelar la geometría del objeto e incorporar parámetros técnicos. Es editable y versátil.

Por otro lado está el archivo de estereolitografía (STL), que convierte ese diseño en una malla tridimensional interpretable por las impresoras 3D, siendo éste el formato final empleado en la fabricación.

El archivo CAD puede ser considerado un programa informático bajo la categoría de obra literaria, según la jurisprudencia del Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) y la Directiva sobre la protección jurídica de programas de ordenador. Estos archivos pueden contener elementos sujetos a protección por derecho de autor, diseño industrial o patente, y su tratamiento jurídico sigue siendo motivo de debate.

No obstante, como señala un informe de la Comisión Europea, la protección mediante patentes se aplica sólo en casos muy específicos y, desafortunadamente, los archivos CAD rara vez califican como productos protegibles. Esto implica que su divulgación no autorizada puede supone la pérdida de control sobre la reproducción y distribución de los diseños.




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¿Modificación de un diseño o nueva creación?

Cuando se realiza una modificación sobre un diseño existente, ¿estamos ante una nueva creación que debe ser protegido o ante una obra derivada sujeta a autorización? Consideramos que hay una modificación sustancial cuando un diseño se adapta a la impresión 3D mediante cambios relevantes en su estructura, materiales, precisión o funcionalidad. Esto incluye rediseños internos, incorporación de geometrías complejas, ajustes por uso de nuevos materiales o mejoras en rendimiento y durabilidad.

Si estas alteraciones suponen una aportación creativa significativa respecto al diseño original, pueden dar lugar a una nueva creación protegible, distinta de una mera obra derivada.

Casos prácticos como ejemplos

Inspirados en el mencionado informe de la Comisión Europea, hemos exploramos distintos escenarios reales como ejemplos de los nuevos retos legales que plantea la impresión 3D:

• Conversión legítima: Una empresa adquiere un archivo CAD, pero necesita transformarlo a STL. Si no hay cláusulas contractuales en contra, la transformación no requerirá autorización y el archivo STL generado puede ser protegido como obra derivada. Esto ocurre, por ejemplo, cuando una empresa de ingeniería civil compra un modelo CAD de una pieza estructural para simular y fabricar mediante impresión 3D. En este tipo de casos, puede convertir el archivo a STL sin restricciones, ya que dicha transformación forma parte habitual de su flujo técnico y no infringe ningún acuerdo contractual.

• Negativa del suministrador: Si el proveedor no entrega el archivo STL, la empresa puede generarlo siempre que sea necesario para un uso legítimo y el contrato no lo prohíba expresamente. Un ejemplo real ocurre cuando un fabricante de maquinaria se niega a proporcionar los archivos STL de piezas de repuesto. Ante la necesidad de mantener operativo su equipo, el cliente final genera los archivos STL a partir de los diseños CAD previamente adquiridos, actuando de manera legal y justificada.

• Ingeniería inversa con modificación: Al reconstruir digitalmente una pieza mediante escaneado, si se introducen modificaciones sustanciales, tanto el archivo CAD como el STL pueden inscribirse como obras protegidas. Un ejemplo representativo es el de una startup que escanea la carcasa de un dron comercial y le introduce mejoras funcionales, como ranuras para ventilación y soportes para cámaras térmicas. El resultado es un diseño con aportes creativos propios que puede ser registrado como obra derivada bajo protección legal.

• Ingeniería inversa sin modificación: Si no se modifica la pieza y ésta se encuentra protegida por un diseño industrial vigente, se necesitaría autorización. Pasados 25 años desde su registro, un diseño industrial registrado pierde su protección, permitiendo su uso libre salvo que esté amparado por otras formas de propiedad intelectual, como el derecho de autor. Un caso típico es el escaneo y reproducción fiel de la carcasa de un panel de control de un avión comercial aún en uso. Si dicho diseño sigue registrado, su copia sin permiso constituiría una infracción.

• Producción en contextos extremos: En situaciones como misiones militares o humanitarias, puede ser necesario fabricar piezas que no están disponibles. Si se realizan modificaciones importantes al diseño original, podrían generarse nuevas obras protegidas por derechos de autor. En caso contrario, podría producirse una infracción. No obstante, en contextos de emergencia, como sucedió durante la pandemia de covid-19, cuando el hospital de Chiari, en Italia, logró producir válvulas de respiradores mediante impresión 3D ante la falta de suministros, el uso de diseños protegidos sin permiso puede justificarse por razones de interés público. Lo mismo puede aplicarse en un conflicto armado, donde se recurra a la impresión 3D para fabricar un soporte de tren de aterrizaje de un avión de combate y así mantenerlo operativo. En este tipo de escenarios, la ley puede contemplar excepciones, siempre que la actuación sea proporcional, necesaria y se intente compensar al titular de los derechos.




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Desafíos normativos entre territorios

El informe de la Comisión Europea destaca expresamente que no existe un marco armonizado para la protección jurídica de los archivos digitales en el contexto de la impresión 3D.

La legislación aplicable depende del lugar donde se genera o transforma el archivo, de si los derechos están registrados en el país correspondiente y de los tratados internacionales en juego. Dado que los derechos de propiedad intelectual son territoriales, una acción legal válida en un país puede no tener efecto en otro.

La fragmentación normativa entre Estados miembros de la Unión Europea genera inseguridad jurídica. Aunque organismos como la Oficina de Propiedad Intelectual de la Unión Europea (EUIPO) y la Oficina Europea de Patentes (OEP) han comenzado a abordar estas cuestiones, aún no existe un marco armonizado y específico.




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Propuestas ante los retos legales

Para avanzar hacia una gestión más eficaz, proponemos la aplicación de cuatro medidas fundamentales:

• Establecer registros específicos para archivos de diseño tridimensional.

• Fomentar tecnologías de protección digital, como marcas de agua o cifrado.

• Desarrollar contratos claros que definan autoría, derechos y licencias en proyectos colaborativos.

• Promover la educación jurídica entre diseñadores, ingenieros y fabricantes.

En conclusión, si queremos llegar a un equilibrio entre innovación, protección de los diseños digitales y seguridad jurídica efectiva, no habrá más remedio que adaptar el marco jurídico de la impresión 3D.

The Conversation

Las personas firmantes no son asalariadas, ni consultoras, ni poseen acciones, ni reciben financiación de ninguna compañía u organización que pueda obtener beneficio de este artículo, y han declarado carecer de vínculos relevantes más allá del cargo académico citado anteriormente.

ref. Propiedad intelectual: retos en la legislación de la impresión 3D – https://theconversation.com/propiedad-intelectual-retos-en-la-legislacion-de-la-impresion-3d-255036

Tunicelas, jubones, cueras… ¿qué llevaban puesto los intérpretes en los teatros del Siglo de Oro?

Source: The Conversation – (in Spanish) – By Javier Mora García, Profesor de lengua e investigador, Universidad de Valladolid

‘El teatro’, de Ricardo Urgell Carreras. Museo del Prado

El teatro es un espectáculo que ha existido desde tiempos inmemoriales y que sigue muy vivo en la actualidad. Su esencia es la escenificación de un texto delante del público. Y aunque toda la representación pivota alrededor de esa pieza dramática, que tiene un valor incalculable, en ella también intervienen otros elementos.

Uno de ellos es el vestuario, que sirve para representar y caracterizar a los personajes. Con la ropa que visten y los complementos no solo podemos identificarlos, sino también conocer sus verdaderas intenciones en el drama.
Y en el Siglo de Oro, una época dramatúrgicamente muy rica para España, encontramos atuendos que siguen utilizándose en la actualidad.

Porque… ¿cómo se vestían los intérpretes en ese periodo?

Vestirse desde dentro

Corpiño. España. Principios siglo XVIII.
Metropolitan Museum. Nueva York.

La camisa, prenda interior, era lo primero que se ponían los actores. Era una vestimenta blanca, larga y fina que en ocasiones cubría el cuello y que podía llevar encajes tanto en la parte superior como en las mangas.

También había variaciones de esto, como la túnica –la misma que se utilizaba en época romana– y la tunicela –como la anterior pero de menor tamaño–, utilizadas para encarnar a personajes de la Antigüedad. Igualmente, existía la vestidura episcopal, una prenda única a modo de vestido, con mangas cortas, que se ponía debajo de la casulla.

Sobre las anteriores, las actrices utilizaban el corpiño –que se ajustaba a la camisa– o la faja –alrededor del cuerpo–.

Encima de estas prendas se ponían las ropas de vestir a cuerpo. Eran las que daban decoro tanto a los hombres como a las mujeres que las llevaban. Ellos utilizaban sobre todo jubones y coletos para cubrir el torso, pero para el abdomen y las piernas había mayor variedad de opciones. Las botargas, por ejemplo, solían ser de colores porque las llevaban personajes ridículos de comedias. Asimismo existían las calzas, de una pieza hasta el siglo XVI y de dos a partir de entonces: las superiores se llamaban también muslos y las inferiores medias calzas o medias.

Con el tiempo, las calzas fueron sustituidas por los calzones, con unas perneras que llegaban hasta las rodillas. Estos también eran conocidos como muslos o gregüescos, siendo una variedad de estos últimos los valones. Todos fueron reemplazados posteriormente por los calzoncillos en los hombres y las bragas en las mujeres.

Las mujeres tenían el sayuelo, que cubría el tórax –relevado por el jubón–, y la basquiña, que cubría desde la cintura hasta el suelo.

Abrigarse en escena

Los trajes de encima, por su parte, se colocaban sobre las anteriores prendas, y en ellos encontramos varias posibilidades.

La ropilla fue el más importante del Siglo de Oro. Iba entallada a la cintura y se completaba con unas faldillas. En origen solo estaba destinada a los hombres, pero en el siglo XVII también comenzaron a vestirla las actrices. El sayo, que cubría la rodilla e incluso el tobillo, cayó en desuso en detrimento de la cuera o la ropilla.

La cuera era una especie de chaqueta de piel que se colocaba sobre el jubón. Se introdujo en el vestuario civil desde el atuendo militar y eso identificaba a los intérpretes en papeles castrenses. También estaban el faldón, una especie de falda que normalmente iba con la túnica, o la marlota, vestidura morisca que permitía representar personajes árabes.

Una capa rosa con el borde decorado.
Ejemplo de ferreruelo.
Victoria & Albert Museum

Asociados a los papeles de pastores se encontraban el pellico –una zamarra– y el vaquero –una falda muy amplia–. El roquete, una vestidura blanca cerrada y con mangas, se vinculaba con otro estamento de la sociedad: los obispos.

Había otros elementos que se utilizaban para cubrir estas ropas, como la capa, típica de los hombres. También empleaban el capuz, parecido a la anterior, y el capotillo, que era unisex y que podían llevar tanto caballeros como villanos. Y alcaldes, cortesanos o estudiantes solían vestir el ferreruelo, otra variedad de la capa.

Que no falten los complementos

Chaqueta con cuello alto cerrada con una especie de ligazón decorativo.
Chaqueta del siglo XIX cerrada con alamares.
Wikimedia Commons

Los elementos de adorno también eran importantes. Ahí encontramos broches, denominados alamares, argentería –bordados de plata–, banderas –insignias militares que portaban actores que representaban a estos personaje– o pasamanos –una especie de trencillas para adornar los vestidos–. La cabeza se cubría con bonetes –que portaban los eclesiásticos–, gorras –para las labradoras– o mitras –destinadas a los persas–.

Como vemos, en el Siglo de Oro había mucha rigurosidad con el decoro de los personajes, ya que se entendía que era una parte esencial de la escenografía. El vestuario permitía que el espectador lograse identificar inmediatamente a quién se estaba representando. La primera impresión que tenía la audiencia venía dada por estas prendas y su mayor o menor afinidad con los intérpretes estaba determinada por si estaban mejor o peor vestidos.

Por otro lado, las posibilidades económicas de las compañías teatrales eran variadas. Por este motivo, aquellas obras con mayor riqueza de vestuario y un mejor cuidado de las prendas estaban costeadas por grupos con gran poder adquisitivo, mientras que los más humildes no podían permitirse este despliegue de medios.

En definitiva, este vestuario teatral del Siglo de Oro no solo ha demostrado la gran variedad de prendas que portaban los intérpretes teatrales, sino también su pervivencia. Aunque algunas han desaparecido, otras se siguen utilizando en la actualidad y sirven no solo para caracterizar a los personajes, sino también para acercarnos al teatro de esta época.


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The Conversation

Javier Mora García no recibe salario, ni ejerce labores de consultoría, ni posee acciones, ni recibe financiación de ninguna compañía u organización que pueda obtener beneficio de este artículo, y ha declarado carecer de vínculos relevantes más allá del cargo académico citado.

ref. Tunicelas, jubones, cueras… ¿qué llevaban puesto los intérpretes en los teatros del Siglo de Oro? – https://theconversation.com/tunicelas-jubones-cueras-que-llevaban-puesto-los-interpretes-en-los-teatros-del-siglo-de-oro-253398

¿Podrá EE. UU. cumplir su amenaza de imponer aranceles a España por no subir su gasto en defensa?

Source: The Conversation – (in Spanish) – By Armando Alvares Garcia Júnior, PDI. Derecho Internacional Público y Relaciones Internacionales, UNIR – Universidad Internacional de La Rioja

Donald Trump junto al secretario general de la OTAN, Mark Rutte, durante la cumbre del Tratado que tuvo lugar el pasado 25 de junio en La Haya. Brian Jason/Shutterstock

Durante la última cumbre de la OTAN, celebrada en La Haya el pasado 25 de junio, el presidente estadounidense Donald Trump lanzó una advertencia directa a España: si no incrementa su gasto militar hasta el 5 % de su PIB, Estados Unidos le impondrá represalias comerciales.




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Esta amenaza, expresada con la frase “les vamos a hacer pagar el doble” mediante la política arancelaria, ha generado preocupación en sectores económicos españoles con fuertes vínculos comerciales con EE. UU. como el del aceite de oliva, el vino y los productos farmacéuticos.

Pero ¿es realmente viable desde un punto de vista jurídico la aplicación de esta medida?

Comercio exterior: competencia de Bruselas

Desde la perspectiva europea, la Unión está legalmente protegida por el principio de competencia exclusiva en materia de política comercial: solo la Comisión Europea puede negociar, imponer o responder a aranceles, lo que impide que Estados Unidos pueda sancionar sólo a España, sin involucrar al resto del bloque. Cualquier intento de penalización unilateral vulneraría el marco establecido por el Derecho de la UE y llevaría inevitablemente a respuestas conjuntas.

Por otra parte, Washington cuenta con herramientas legislativas –la Sección 232 del Trade Expansion Act, la Sección 301 del Trade Act y la Ley de Poderes Económicos de Emergencia Internacional– que le permiten imponer aranceles frente a prácticas comerciales que su gobierno considere “injustas”.

De hecho, Trump ya ha aplicado este año aranceles elevados a productos como el acero o el aluminio, y ha amenazado con aumentar hasta un 200 % los impuestos sobre vinos y licores europeos. Sin embargo, los tribunales estadounidenses han bloqueado algunas de estas medidas al considerar que exceden los poderes presidenciales o contravienen la Constitución, lo que revela límites internos a su actuación.




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Las herramientas de la OMC

Desde el punto de vista de la Organización Mundial del Comercio (OMC), si Estados Unidos impusiera gravámenes adicionales sin base jurídica válida estaría infringiendo los acuerdos de comercio internacional ya pactados.

Las únicas excepciones aceptadas por la OMC son aquellas derivadas de riesgos a la seguridad nacional, pero su interpretación es limitada y, además, la UE ya ha iniciado consultas ante el organismo multilateral contra los aranceles anunciados por Trump el pasado mes de abril.

Dado que el Órgano de Apelación de la OMC está paralizado desde diciembre de 2019, cuando la primera Administración Trump bloqueó su renovación para evitar resoluciones contrarias a los intereses estadounidenses, la Unión Europea ha adaptado su legislación mediante la enmienda a su reglamento de ejecución de comercio (Reglamento 654/2014), en vigor desde febrero de 2021, para autorizar represalias unilaterales en caso de que la parte contraria recurra a la llamada “apelación en el vacío” (es decir, que no suspende la ejecución de la resolución apelada).

En paralelo, la UE –junto a países como Canadá, Noruega, Brasil y Reino Unido, el último en sumarse)– impulsa mecanismos alternativos bajo el amparo de las normas establecidas por la OMC, que faciliten la resolución de disputas comerciales entre los miembros firmantes mientras persista el bloqueo institucional.

La Comisión Europea también pretende involucrar a los países integrantes del Acuerdo de Asociación Transpacífico (CPTPP). Entre otros, Australia, Canadá, Chile, Japón, México, Perú, Singapur y el Reino Unido (que se adhirió a ese bloque en diciembre de 2024).




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Ley y orden

Aunque políticamente poco probable, Trump podría imponer aranceles selectivos a España amparándose en su normativa nacional, o incluso alegando una emergencia nacional, pese a que estas decisiones violarían los compromisos de EE. UU. ante la OMC y la UE.

Desde el punto de vista jurídico, actuar de forma discriminatoria dentro de la Unión Aduanera Europea contravendría tanto el principio de no discriminación o de nación más favorecida, por el que cada país miembro de la OMC trata por igual al resto –es decir, como a sus interlocutores comerciales más favorecidos–, como los límites fijados en los acuerdos ya abarcados por el organismo multilateral.

Incluso si EE. UU. justificara adecuadamente una excepción de seguridad nacional para la aplicación de aranceles extraordinarios a España, la OMC podría examinar y limitar la medida por tratarse de una cláusula no autoejecutable, cuya entrada en vigor requiere de actos administrativos o legislativos que la hagan aplicable.

¿Negociación o presión?

En un momento en que Bruselas renegocia sus acuerdos comerciales con Washington –aunque el plazo inicialmente fijado para el 9 de julio podría prolongarse incluso hasta septiembre– la amenaza de Trump, en apariencia dirigida a los miembros de la OTAN, también busca influir en la negociación comercial.

Si Estados Unidos intentara penalizar a España de forma individual se encontraría con la defensa colectiva de Bruselas, obligada a salvaguardar la integridad del mercado único.

Unidad europea e intereses comerciales

Política y económicamente, la amenaza a España le sirve al presidente estadounidense como arma de negociación. Pero la UE tiene la capacidad legal para iniciar consultas en la OMC, ganar arbitrajes y activar medidas de represalia unilaterales, incluso sin que el Órgano de Apelación de la OMC esté funcionando plenamente. Así, aunque posible, esta medida carece de justificación jurídica sólida y no escaparía de una respuesta organizada desde Bruselas.

Por otra parte, dentro del bloque europeo, Alemania presiona para alcanzar un acuerdo “rápido y sencillo”, centrado en sectores críticos como la automoción y la industria farmacéutica. El canciller Merz advierte que el sector exportador alemán no puede permitirse demoras.

Aunque Trump utilice el gasto en defensa como palanca cruzada, la UE debe mantener su coherencia negociadora, tratando a España como parte inseparable del bloque y evitando ceder ante amenazas externas.

The Conversation

Armando Alvares Garcia Júnior no recibe salario, ni ejerce labores de consultoría, ni posee acciones, ni recibe financiación de ninguna compañía u organización que pueda obtener beneficio de este artículo, y ha declarado carecer de vínculos relevantes más allá del cargo académico citado.

ref. ¿Podrá EE. UU. cumplir su amenaza de imponer aranceles a España por no subir su gasto en defensa? – https://theconversation.com/podra-ee-uu-cumplir-su-amenaza-de-imponer-aranceles-a-espana-por-no-subir-su-gasto-en-defensa-260001